Un estudio reciente sugiere que, pese las restricciones de seguridad en el uso de la clozapina, este antipsicótico de segunda generación está asociado con una menor tasa de mortalidad en comparación con otros antipsicóticos en el tratamiento de la esquizofrenia.
En este trabajo se analizó la causa de la muerte de casi 67.000 pacientes de esquizofrenia en Finlandia entre 1996 y 2006, y se compararon las tasas de mortalidad relacionadas con el uso de los antipsicóticos usados con mayor frecuencia.
Se observa que aunque el uso de antipsicóticos de segunda generación aumentó, de un 13 a 64%, la diferencia en la esperanza de vida entre los pacientes de esquizofrenia a partir de los veinte años de edad y la población general no aumentó.
El mayor riesgo de muerte se observa entre los pacientes que toman quetiapina (45% más alto) y el menor riesgo entre los que tomaban clozapina (25% más bajo). Además, el uso a largo plazo (de 7 a 11 años) de antipsicóticos en general está asociado a una tasa de mortalidad un 20% más baja que cuando no se toma este tipo de fármacos.
Palabras claveAntipsicóticosClozapinaEsquizofreniaTasa de mortalidad CategoriasNeuropsiquiatría